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Atracciones en Londres
► Burlington Arcade
Burlington Arcade
Londres
En una ciudad tan
grande como Londres, a veces es suficiente dar la vuelta de la esquina para
encontrarte en un mundo completamente diferente del anterior. Lugares diferentes,
que seg? la tradici? se respetan rec?rocamente. El ca?ico, joven y vivaz de
Piccadilly Circus se contrapone al barrio serio y elegante de
Mayfair, solamente a dos minutos de distancia.
Ubicada en
Piccadilly Street, un tiempo la calle de los fantasiosos cuellos de vestidos
usados por los gentilhombres locales, encontramos la Burlington Arcade,
la galer? real del shopping. Frecuentada por la clase alta, y concreta llamada
a la
tradicional elegancia brit?ica,
la de las cercanas sastrer?s de lujo de la
Savile Row.
 La
Burlington Arcade es una de las galer?s m? bonitas de la capital, la m?
elegante, la primera que fue abierta al p?lico, y la m? larga de todo el
Reino Unido,
desde su inauguraci? en 1819. Ubicada entre Piccadilly Street y
Bond Street,
en los llamados Burlington Gardens, la galer? Burlington es considerada
precursor de todas las galer?s regency europeas, que desde la mitad de
los ochocientos empezaron a proliferar en toda Europa, desde
Bruselas
a N?oles a MiL', un autentico shopping centre del pasado. Se
construy?con el fin de albergar las tiendas de joyas y accesorios a la moda
para la aristocracia londinense, un verdadero refugio de la clase alta de la
fangosa Piccadilly Street de aquel entonces.
Las obras fueron encargadas por los duques de Devonshire, herederos del
adyacente Burlington House, al arquitecto Samuel Ware, que la
dise? con un largo pasillo con 72 peque?s unidades laterales de dos plantas
cada una. La elegancia todav? hoy queda el principal rasgo de esta estructura.
Se acompa? a aquellas que son las antiguas reglas de conducta para cualquier
persona que se encuentre en su interior, visitante o empleado.
En efecto, dentro de la galer? est?prohibido tener actitudes que puedan de una
manera ?da?r? la etiqueta aristocr?ica vigente, como por ejemplo silbar,
correr, tocar instrumentos musicales, hablar alto, comer o hasta abrir un
paraguas. Adem? no se aprecia la costumbre de pasear por la galer? con los
cochecitos para los ni?s.
El respecto de las reglas de conducta est? bajo la vigilancia de sus
caracter?ticos guardianes, o tal vez seria mejor decir mayordomos, los
Beadles. Estos pintorescos vigilantes todav? se visten con el tradicional
abrigo acompa?do de una elegante chistera.
Vestido y
actitudes se conservan como los t?icos originales de los
Beadles, del regimiento de Lord Cavendish el 10? Ussaros.
En total la
galer? alberga cuatro Beadles; el principal, nombrado en 2002, tiene el
deber de proteger la estructura y las costumbres de la galer?, sirviendo
obviamente numerosas tiendas en su interior, que hoy amontan a 40
aproximadamente.
Como ya hemos
dicho, las tiendas presentes en la galer? eran en origen 72, posicionados hoy
como en aquel entonces al lado de su largo pasillo.
Muchas de estas tiendas, son aut?ticos testimonios arquitect?icos de la
Londres de la primera mitad del ochocientos. La tienda del numero 61 de la
Burlington Arcade, por ejemplo, es un monumento hist?ico, y por eso est?
prohibida cualquier prohibici? arquitect?ica y uso.
Los d's en la Burlington Arcade siempre se van sucediendo sin grandes clamores,
su austeridad raramente ha sido amenazada por casos sensacionalistas o
similares. Sin embargo, solamente un acontecimiento ha sido suficiente para
todos, solamente por la grande estenograf? que se utilizo: fue el robo del
1964, en perfecto estilo con Arsenio Lupin; seis hombres disfrazados
entraron en la galer? con toda rapidez con un coche de lujo, una Jaguar, se
pararon en la tienda de la Asociaci? Goldsmiths and Silversmiths (orfebres y
plateros), donde se apoderaron de joyas de valor muy elevado.
A pocos pasos de
Piccadilly Circus te espera un grande se?r elegante con frack que te acoger? a
veces con un gesto de reverencia.
Sube un par de pelda?s y admira la bonita estructura arquitect?ica, simple y
al mismo tiempo refinada, un largo pasillo y un techo alto, con elegantes
escaparates. Elegantes son tambi? las luces y las farolas presentes, adem? de
las tiendas donde pararse.
Los escaparates te presentan los nombres de las grandes marcas ingleses e
internacionales, testimonios de la tradici? brit?ica m? autentica. Su estilo
regency es perfecto, desde las tiendas de antig?dades a las cL'icas
joyerias y art?ulos de plata, come Richard Ogden, Daniel Bexfield,
Pickett o anche David Duggon e Hirsh, donde encontrar?
productos de piel muy bonitos, como bolsos y cinturones, todos artesanales.
Entre estos destacan los objetos de lujo St Petersburg, creada por
Carl Fabergè, o bien la tienda de Map of the World (nuestro
preferido), donde encontrarè una incre?le colecci? de antiguos y raros mapas,
desde el siglo XVI al XIX.
Las tiendas de ropa de la Burlington Arcade son tambi? de tradici?
cL'ica. Elegancia y buen gusto a e buen gusto lo caracterizan como el lugar
para el shopping de la elite londinense. Cashmere, seta y otros art?ulos de
lujo, dominan. Entre los muchos nombres presentes,
House of Cashmere, Ana Konder y sus accesorios, N.Peal,
Mackintosh Globetrotter (famoso por las maletas y los accesorios de piel),
los zapatos y la peleter? de Church's Shoes y de Crockett & Jones.
Para los amantes
del t? pero no solo para ellos, aconsejamos visitar la tienda del t?Luponde
Tea, con la preciosa especia procedente de las monta?s de Livingstonia en
Tanzania.
La Burlington Arcade es por cierto un lugar para no perderse, una maravilla de
la elegancia del pasado londinense; si tu bolsillo no te lo permite, siempre
queda una buena ocasi? para admirar tanta belleza.
Direcciones:
Burlington
Arcade, Mayfair
Horarios:
lunes-viernes 9.30-17.30; s?ado: 10.00-18.00
Metro: Piccadilly
Circus, Green Park, Bond Street
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